Desde Aviñón, pondrás rumbo a Roussillon, un pueblo situado en la cima de un acantilado de ocre. Allí, podrás observar el perfecto equilibrio entre hombre y naturaleza, entre ocre y piedra, con todas esas fachadas lavadas en ocre. Si realizas el recorrido el jueves, tendrás la oportunidad de pasear por el mercado.
A continuación, harás una parada para obtener unas fotografías increíbles de las vistas panorámicas desde Gordes, un pueblo de piedra situado en lo alto de una colina que remata en un acantilado. El castillo fortificado y la iglesia dominan las casas típicas del pueblo, que se construyeron con piedras procedentes de la roca sobre la que se elevan.
El recorrido continúa hacia Fontaine de Vaucluse, donde podrás caminar hasta la cueva donde nace el río Sorgues. Este impresionante manantial guarda muchos secretos y, a día de hoy, los espeleólogos continúan sin saber su profundidad exacta.
Después de una parada para el almuerzo, llegarás a Saint Rémy de Provence para descubrir este encantador lugar a través de un paseo a pie. La siguiente parada será el pueblo medieval de Les Baux de Provence, situado en la estribación rocosa de la cordillera de los Alpilles. Descubre su centro histórico, sus preciosas casas del siglo XVI y la iglesia de Saint VIncent, de estilo románico.
Por último, visita Pont du Gard (entradas incluidas), el acueducto mejor conservado de la época romana, que data del siglo I y está declarado patrimonio de la Unesco.