Saboree la vida rural española en el encalado pueblo de Mijas. Descubra los secretos de la rica historia de la región con una copa de vino local, compre cerámica artesanal y pasee por las calles bordeadas de flores con vistas al mar.
Comenzará subiendo a Mijas por las colinas. Una vez allí, dispondrá de tiempo libre para pasear a su ritmo por las sinuosas callejuelas del pueblo. Podrá comprar productos típicos andaluces, como marroquinería y cerámica, ver la ermita en las rocas, los famosos burro-taxis o incluso visitar una fábrica de chocolate; a los niños les encantará. Después, le esperará una copa de vino local y una tapa en un bar cercano, en pleno centro.
A continuación, súbase al autobús para realizar el pintoresco trayecto hacia Fuengirola, pasando por olivares y pinares, e incluso podrá divisar el Castillo de Sohail, una fortaleza defensiva construida en el siglo X. Por último, tendrá tiempo para relajarse en un crucero costero de Fuengirola a Benalmádena.